Convierte tu casa en un spa con la ayuda
del bicarbonato de sodio
¿Sabías que el bicarbonato de sodio puede beneficiar tu régimen
de belleza?
Entérate aquí todas las formas en que
puedes utilizarlo.
Múltiples usos para el bicarbonato de sodio en casa
1. Como
exfoliador: Crea tu
propia crema exfoliante en casa. Haz una mezcla que sea tres partes bicarbonato
y una parte agua. Cuando se forme una pasta, frotala sobre tu piel por unos
minutos. Luego enjuaga tu cara. Esta misma mezcla la puedes usar como un
exfoliador corporal.
2. Como desodorante: Si tienes la piel sensible, el bicarbonato
puede ser una desodorante sencillo y natural. Coloca un poco del polvo en tus
axilas. No mancha tu ropa y ayuda a neutralizar el área para prevenir malos
olores.
3. Irritación al afeitarse: Si sufres de sarpullido al afeitarte,
alivia tu piel con una mezcla de bicarbonato y agua. Combina una taza de agua
con una cucharada de bicarbonato y deja que la solución se seque naturalmente
sobre tu piel, alrededor de cinco minutos. Luego, enjuaga con agua fría.
4. Como champú seco: El ‘dry shampoo’ o champú seco es
maravilloso. Pero, si se te acabó y necesitas que tu cabello luzca limpio y sin
grasa, esparce un poco de bicarbonato sobre tus raíces y mueve bien tu cabello
para que se riegue por completo, luego péinate.
5. Para una mejor manicura: En vez de cortar tus cutículas, lo cual
puede causar una infección si no se hace bien, exfolia tus manos para emparejar
el área. Crea una pasta con tres cucharadas de bicarbonato y una cucharada de
agua. Con una brocha para las uñas, frota la mezcla sobre el área en mociones
circulares. Luego enjuaga tus manos con agua tibia y aplica el esmalte.
6. Un tratamiento para tus pies: Un tratamiento tipo spa para tus pies es
fácil de hacer en casa con el bicarbonato. Crea un baño para tus pies en un
recipiente con la misma cantidad de agua tibia que de bicarbonato. Por ejemplo,
si usas dos tazas de agua agrega dos tazas de bicarbonato. Coloca tus pies
dentro del recipiente y déjalos poro 10 minutos. Luego, sácalos y aplica tu
crema favorita en tus pies y envuélvelos con una toalla caliente de 5 a 10
minutos.
7. Para limpiar tu cepillo: Si te fijas bien en tu cepillo de cabello,
quizás notes que se ha acumulado producto en la base de los dientes. Coloca el
cepillo en un cubo con agua tibia y una cucharadita de bicarbonato. Déjalo por
20 minutos. Enjuaga el cepillo y déjalo secar antes de usarlo.
8. Para aliviar las quemaduras de sol: Si te quemaste en la playa este verano,
llena la tina de agua tibia (no caliente) y agrégale media taza de bicarbonato.
9. Para blanquear tu sonrisa: Para hacerte un tratamiento de
blanqueamiento en casa y sin químicos, moja tu cepillo de dientes y échale un
poco de bicarbonato. Luego lávate los dientes con el bicarbonato por un minuto.
Puedes repetir este proceso una o dos veces por semana, pero ojo que no debe
reemplazar tu pasta de dientes normal.
Más usos del bicarbonato de sodio
Cabello
liso
¿Alguna
vez se te ocurrió agregarle bicarbonato de sodio a tu champú? Claro que no,
nunca imaginarías que esto le podría devolver a tu cabello la vida, el brillo y
la suavidad que todas queremos lucir.
En
cuanto notes tu cabello opaco y deslucido, agrega un poco de bicarbonato a tu champú
y lávalo como lo haces habitualmente. Esto lo suavizará gracias al poder de
oxigenación del bicarbonato.
Piel
seca
La piel
seca del rostro no sólo no luce bien, sino que incluso te hace sentir incómoda.
Para hidratarla, las mujeres acostumbramos gastar fortunas en cremas, aceites y
leches hidratantes, pero para solucionar este problema, también puedes contar
con el bicarbonato de sodio.
Prepara
una mezcla a base de bicarbonato y agua hasta formar una pasta, aplícalo sobre
la piel como si fuera una máscara y déjala actuar por una hora más o menos.
Lava con agua tibia y notarás los cambios en el momento.
También
puedes utilizar esta misma preparación para la piel de codos y rodillas que
suelen resecarse.
Pies
suaves
La
única manera de mantener los pies en condiciones es visitando a la pedicura,
pero lo cierto es que el bicarbonato también puede ayudarte con esto.
Utiliza
3 cucharadas de bicarbonato y mezclalas con agua tibia. Agrega unas gotas de
aceite de durazno, lavanda o coco y déjalos en remojo durante media hora. Seca
tus pies y pasa algún tipo de piedra pómez o una lima exfoliante para retirar
restos de piel seca.
También
puedes agregar parte de esta preparación para frotar durezas que hayan quedado
adheridas.
Con información de:
Medinatural.org
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