¡Blanquea tu piel durante 7 días, adiós manchas y piel apagada!

Por si no lo sabías la piel es un órgano sumamente delicado, aparentemente todo lo que nos rodea puede afectarla y en el momento en que menos te lo esperas, el sol puede convertirse en tu peor pesadilla porque crea unas manchas terribles en tu piel que pueden durarte toda la vida.

Es por esto que es increíblemente usual escuchar a las mujeres que no quieren exponerse demasiado tiempo al sol, por lo que deberían estar siempre buscando alternativas para rehidratar su piel cada vez que crean que han sido muy perjudicadas por esta estrella, pero esto puede ser muy costoso.

Los tratamientos de belleza destinados para la piel son un arma de doble filo, ya que prometen arreglar los daños que la naturaleza le han hecho, pero no te dicen que esto viene con un gran precio: poco a poco va destruyendo las células buenas y puede terminar provocando que te dé cáncer.

Para que no termines expuesto a esto es importante que conozcas unas alternativas más naturales que no sean tan agresivas con tu piel, y que, como una bonificación extra, no tendrás que gastar ni la mitad del dinero que probablemente tendrías que hacerlo si compraras más esas cremas.

Aprende a elaborar esta mascarilla para la cara que es totalmente natural

Lo más sorprendente de esta mascarilla es que no solo tiene que ser para que te blanquee la cara, quitándote todas las imperfecciones, sino que también es capaz de nutrir profundamente tu piel evitando que envejezca demasiado rápido.

Sin tener que ir a los salones especializados, podrás tener la oportunidad de realizar este tratamiento con tan solo comprar unos cuantos ingredientes en el mercado y seguir los pasos que te daremos a continuación para que los puedas preparar.

Lo que tienes que comprar para preparar la mascarilla:

·         Busca un tomate rojo que esté bien maduro

·         Un poco de leche natural

El modo de preparación es el siguiente:

·         Ralla todo el tomate

·         Quita la piel del tomate y solo usa la pulpa

·         Con la ayuda de un colador elimina las semillas

·         Pon lo que queda del tomate con la leche dentro de un recipiente

·         Mueve todo hasta que se mezcle

·         Mete todo dentro de una botella con dosificador

Empapa un algodón con la mezcla y ve aplicando esto encima del rostro de manera muy delicada, espera que actúe por quince minutos y lo quitas con un paño líquido.